The development has been one of these harmful words that for decades has poisoned society. The development is understood as a goal that all countries must reach an inevitable destiny where reigns the maximization of wealth, promotes individualism over community sense and rapidly destroy our Mother Earth. That development has become a trap that transcends the economic and the political and culturally has taken root in the minds of the population. This paper presents various assessments of the notion of development, highlights the assumptions behind their connotations.Questions the fact that poverty, or poverties, reduction is not enough to copy recipes and models, many of them failed, it is looking for other alternatives, is looking at the world through different eyes; It is to represent Honduras as our own to transform it. In this country lied, oppressed, robbed, abducted and punished for corruption, poverty has continued to grow despite the many interventions called development. Therefore, we need a different way of acting; create a thought that denature the shameful social exclusion suffered by these people, we need a real cognitive justice; study reality in ascending to comprehend and understand; it is necessary to reconsider and analyze assumptions of so many men and women who have loved and served his nation; because talking and do more of it will mean to be faithful witnesses of exclusion and poverty, myths and development ghosts that refuse to disappear in this noble country called Honduras. Economía y Administración (E&A) Vol.6(1) 2015 ; El desarrollo ha sido una de esas palabras nocivas que durante varias décadas ha envenenado a la sociedad. El desarrollo se entiende como una meta que todos los países deben alcanzar, un destino inevitable en donde impera la maximización de la riqueza, se promueve el individualismo por encima del sentido comunitario y se destruye a pasos agigantados nuestra Madre Tierra. Ese desarrollo se ha convertido en una trampa que trasciende lo económico y lo político y se ha arraigado culturalmente en el imaginario de la población. Este trabajo presenta diversas valoraciones de la noción del desarrollo, resalta las premisas que están detrás de sus connotaciones.Cuestiona el hecho de que para reducir la pobreza, o las pobrezas, no basta con copiar recetas y modelos, muchos de ellos fracasados, se trata de buscar otras alternativas posibles, es mirar al mundo con otros ojos; es representar a nuestra Honduras como propia para poder transformarla. En este país mentido, oprimido, robado, castigado y secuestrado por la corrupción, la pobreza no ha parado de crecer a pesar de las múltiples intervenciones del llamado desarrollo. Por ello, necesitamos una manera diferente de actuar; crear un pensamiento que desnaturalice la vergonzosa exclusión social que sufre este pueblo, necesitamos una verdadera justicia cognitiva; estudiar la realidad de forma ascendente para comprender y comprendernos; es necesario retomar y analizar postulados de tantos hombres y mujeres que han amado y servido a su nación; porque hablar y hacer más de lo mismo implicará ser fieles testigos de la exclusión y la pobreza, de los mitos y fantasmas del desarrollo que se niegan a desaparecer en este noble país llamado Honduras.Economía y Administración (E&A) Vol.6(1) 2015
En los últimos días, no sin cierto apresurado optimismo, varios medios de prensa anunciaron que el casi ininteligible conflicto estallado en Honduras el 28 de junio pasado estaba por llegar a su fin: se había llegado a un acuerdo para que el presidente Zelaya recuperara el mando del Ejecutivo del país. Al mismo tiempo se reafirmaba la realización de las elecciones previstas para el 29 de noviembre y que los resultados de éstas serían reconocidos por la comunidad internacional. Esta conclusión no era evidentemente ajena a la presencia en Honduras de Thomas Shannon, el delegado de Hillary Clinton para América Latina aunque cabe recordar que el presidente Oscar Arias (que proporcionó la primera plataforma de negociación entre los dos bandos enfrentados), la diplomacia mexicana y la brasileña, así como la OEA, estuvieron permanentemente trabajando en el sentido de encontrar una solución.Expuesta la situación en los términos que lo hizo la prensa internacional, que retoman efectivamente las grandes líneas de la situación al 30 de octubre, todo hace pensar, en este momento, que la crisis se aproxima a su fin. Aunque, repetimos, en grandes líneas esto no deja de ser cierto, la cuestión es harto más complicada y es posible que todavía quede un trecho para salir del atolladero y, sobre todo, para que las consecuencias sobre el sistema político comiencen a hacerse sentir en toda su dimensión.El 29 de octubre por la noche, Roberto Micheletti, el presidente de facto, anunció que: "…tenia el placer de anunciar que, hace algunos minutos, he autorizado a mi equipo de negociadores a firmar un acuerdo que marca el inicio de la conclusión de la situación política del país." Según expresa la prensa internacional, el acuerdo obtenido versa sobre "la posibilidad del restablecimiento" de Manuel Zelaya en sus funciones, "el retorno del conjunto del poder ejecutivo anterior al 28 de junio de 2009" y el levantamiento de todas las sanciones que la comunidad internacional estableció sobre el gobierno Micheletti. Al mismo tiempo se habla de la formación de "un gobierno de reconciliación nacional" y la realización de las elecciones en la fecha prevista.Además de que el lenguaje utilizado no es particularmente preciso en lo que hace a la restauración de Manuel Zelaya en su silla presidencial ("la posibilidad del restablecimiento"), el procedimiento previsto en el acuerdo para llegar a ese objetivo resulta poco auspicioso para el depuesto presidente.En efecto, aunque la información no es totalmente clara en el momento de la redacción de este editorial, para que Zelaya retome efectivamente la presidencia se deben cumplir una serie de etapas que no parecen fáciles de zanjar.En primer lugar ha de formarse una Comisión de Verificación destinada a velar por la conformación del gobierno de reconciliación nacional. Supervisada por la OEA, dicha Comisión se integra con 2 hondureños (Jorge Arturo Reina, representando a Zelaya y Arturo Corrales a Roberto Micheletti), dos internacionales (el ex presidente chileno Ricardo Lagos y la ex Secretaria de Trabajo de los EE.UU., Hilda Solís), los que serán acompañados por Víctor Rico, el secretario de Asuntos políticos de OEA.En segundo lugar, el Congreso, tras recibir el informe del Tribunal Supremo de Justicia (el cual, conviene recordar, elevó oportunamente 18 cargos contra Zelaya, incluido el de "alta traición") habrá de pronunciarse sobre la restitución del ex-presidente en su cargo. Admitiendo que el Tribunal Supremo encuentre algún mecanismo creíble para desentenderse de las anteriores acusaciones que él mismo levantó con Zelaya, resulta que el Congreso se encuentra actualmente en período de receso.Por lo tanto, el Congreso deberá, previamente, levantar el receso para recibir el mencionado informe y llamar a sesiones extraordinarias. Considerando la gravedad de la situación esto debería ser una dificultad relativamente fácil de sortear, y posiblemente así resulte ser. Pero hay quienes opinan que el Congreso podría no levantar el receso, intentar llevar adelante las elecciones y, una vez realizadas éstas, proceder a la restitución de Zelaya que, de hecho, sólo quedaría reducido al papel de un "presidente saliente" condenado a gobernar hasta el 29 de enero que es el plazo constitucional para que le entregue el poder al nuevo presidente electo.Paralelamente, tampoco está clara cual es realmente la "ecuación partidaria" en el seno del Congreso. En todas partes, es un tema bastante recurrente la afirmación de que nadie puede realmente predecir con total exactitud cómo van a votar los integrantes de un Congreso. Una de las características de la enorme mayoría de los legislativos en casi todos los países del mundo es que sus votos no siempre son predecibles. En una situación como la de Honduras, cabe presumir que, por lo menos, esta característica incertidumbre que generan las decisiones de un Poder Legislativo, sigue siendo válida.He aquí, entonces, un nuevo probable obstáculo que el acuerdo establecido no explicita en toda su dimensión. El partido en el poder, el Partido Liberal, al que pertenecen tanto Zelaya como Micheletti, tiene 62 escaños en un total de 128. Pero el candidato liberal a la presidencia en las próximas elecciones, Elvin Santos, acaba de anunciar que no existe unanimidad dentro del partido por lo que la formación de una mayoría dispuesta a restituir a Zelaya, requiere de los votos de otros partidos.El otro gran partido, el Partido Nacional, tiene 54 bancas en el Congreso y las restantes se distribuyen entre 3 pequeños partidos minoritarios. Como podrá apreciarse, será necesario juntar 65 votos para que el camino diseñado en el acuerdo pueda llegar a destino y restituir al presidente en su sillón presidencial. Pero, al no estar todos los votos del Partido Liberal, en realidad, la llave para desbloquear la situación la tiene "el Pepe": es decir, el Jefe del Partido Nacional, Don Porfirio Lobo.Porfirio Lobo es el candidato con más chance para ganar las elecciones del próximo 29 de noviembre por lo que cabe presumir que es el más interesado en que se llegue a esas elecciones en condiciones de razonable legitimidad. Con sus 54 bancas en el Congreso puede proporcionar una buena plataforma para lograr los 65 votos capaces de desbloquear la situación y, aunque las cosas no están para nada claras en el seno del Partido Liberal, tal como lo expresó, Elvin Santos, en este momento habría al menos 20 votos liberales dispuestos a votar a favor de que la solución en vías de instrumentación avance.En el caso de que quede superada la aritmética parlamentaria, quedan, sin embargo, pendientes cuestiones no menores. En primer lugar, el tiempo, los plazos y el orden de acuerdo al cual deben darse los pasos acordados constituyen otros tantos desafíos de envergadura. El día 5 de noviembre es el plazo establecido para que se instale el llamado "gobierno de reconciliación nacional". A partir de ese momento debería procederse a la restitución de Zelaya en el Poder Ejecutivo. Pero Micheletti ha dejado entrever que es perfectamente posible que el "gobierno de reconciliación nacional" se instale en la fecha establecida y la restitución de Zelaya en el Ejecutivo se prolongue algo más en el tiempo. Prórroga que, como vimos, puede tener desde razones reales y sustantivas hasta motivaciones espúreas claramente obstaculizadoras del retorno del presidente constitucional.La respuesta de éste no se hizo esperar: "Sólo habrá gobierno de conciliación y unidad si yo soy repuesto como presidente. Si nosotros no estamos de acuerdo, no habrá Gobierno de conciliación. El acuerdo se hace por dos partes. Y yo soy una de las dos partes del acuerdo. Si una de las partes siente que le están haciendo una trampa, el acuerdo se rompe."Como podrá apreciarse, aunque el tiempo es poco, la distancia todavía es larga para que la situación política hondureña pueda llegar a buen puerto.
The cadastre in our country is an issue left by the national academy since the end of the National Cadastre of Multiple-uses or Multi-Purpose, to the point that only the documents are known as manuals and fiscal procedures (Real Estate Tax) and legal (possession of the earth) with which all the other little or nothing known cadastres are wasted. The objective of this study is to expose all the cadastres that are executed in the Republic of Honduras. For this, the methodology of documentation, interviews and collection of information in governmental and municipal entities was applied as methodology. The results of the study generated for the first time an index of cadastres applied in Honduras. At the same time, it shows how most of the information generated by these cadastres is wasted because it is dispersed due to they are not unified or interconnected through a Land Administration System based on a Spatial Data Infraestructure (SDI) of national scope, able to show and use the cadastral data thematic in a single place. This article is expected to be a basis for broader academic studies of the cadastre in our region. ; El catastro en nuestro país es un tema abandonado por la academia nacional desde el ocaso del Catastro Nacional de Usos Múltiples o Multiusos, a tal punto que del Catastro solo son conocidos documentos como manuales y procedimientos fiscales (Impuesto de Bienes Inmuebles) y jurídicos (tenencia de la tierra) con lo cual se desaprovechan todos los otros catastros poco o nada conocidos. El objetivo de este estudio es exponer todos los catastros que se ejecutan en la República de Honduras. Para esto se aplicó como metodología, el estudio de documentación, entrevistas y recolección de información en entidades gubernamentales y municipales. Con los resultados del estudio se generó por primera vez un índice de catastros aplicados en Honduras. A la vez, muestra cómo se desaprovecha la mayoría de la información generada por estos catastros al estar dispersa debido a que los mismos no están unificados o interconectados a través de un Sistema de Administración de Tierras (LandAdministrationSystem) basado en una Infraestructura de Datos Espaciales (IDE) de ámbito nacional, capaz de mostrar y usar la data catastral temática en un solo lugar. Se espera que este artículo sea una base para estudios académicos más amplios sobre el catastro en nuestra región.
Cálix, Álvaro: Honduras: de la crisis política al surgimiento de un nuevo actor social. - S.34-51 Torres-Rivas, Edelberto: Las democracias malas de Centroamérica. Para entender lo de Honduras, una introducción a Centroamérica. - S.52-66 Cruz, José Miguel: Estado y violencia criminal en América Latina. Reflexiones a partir del golpe en Honduras. - S.67-84 Romero, Carlos A.: Las secuelas regionales de la crisis de Honduras. - S.85-99 Rojas Bolaños, Manuel: Centroamérica: ¿anomalías o realidades? - S.100-114 Páramo, Pedro: Honduras y la mala hora de América Latina. - S.115-124 Sanahuja, José Antonio: Entre los valores y los intereses. Las relaciones entre América Latina y la Unión Europea tras el golpe en Honduras. - S.125-144 Manaut, Raúl Benítez ; Diamint, Rut: La cuestión militar. El golpe de Estado en Honduras como desafío a la democracia y al sistema interamericano. - S.145-157 Grabendorff, Wolf: Brasil: de coloso regional a potencia global. - S.158-170
Lo que ha acaecido en Paraguay no es más que un asalto a su incipiente democracia. Se aplicó aquí aquello del "eslabón más débil", en que los sectores más retrógradas se inspiran para imponer regímenes fascistoides. Ese mismo esquema se usó con éxito en nuestra vecina Honduras, con el resultado que todos conocemos.
Migration has been always present in Honduran society, whilst having changes in its trends, which can be historically delimited since the age of discovery and conquest, passing through the times of the Republic and into the mining and banana enclave as immigration, and later became emigration starting from the search of opportunities by Garifuna and Mestizo population connected to the enclave economy, headed to the east coast ports of the United States of America. In time, migration even became the highest in the region, while the country started transforming into an attractive place to immigrate in the seventies to the people of El Salvador who searched lands and jobs, and equally during the seventies and eighties due to the armed conflicts between Guatemala, El Salvador, and Nicaragua, as a refugee. Finally, the current migratory trend in Honduras is emigration, which was generated during the nineties with the introduction of neoliberal politics which depressed several economic sectors, such as agriculture, and generate a large mass of young people without employment or freelancers very inclined to find new opportunities in more developed areas of the country yet mostly overseas, like in the United States of America. Moreover the devastation caused by natural disasters (Hurricane Mitch) further caused that from that moment emigration was entrenched in Honduran population reaching important dimensions, destinations are diversified and a wave of remittance is produced, introducing the country into the global ranking of higher proportions with respect to the Gross National Product. ; La migración siempre ha estado presente en la sociedad hondureña, teniendo cambios en sus tendencias, que pueden delimitarse históricamente. Con el tiempo esta emigración llevó incluso a alcanzar el primer lugar de la región, simultáneamente el país se fue transformando en atractivo para inmigrar en los años sesenta por la población salvadoreña en la búsqueda de tierras y trabajo y en los años setenta y ochenta por los conflictos armados de El Guatemala, El Salvador y Nicaragua, más que todo como refugio. Finalmente la tendencia migratoria actual hondureña es la emigración, misma que se genera en los años noventa con la implementación de las políticas neoliberales que deprimen algunos sectores económicos, entre ellos el agrícola y generan una gran masa de jóvenes sin empleo o cuentapropistas muy proclives a la búsqueda de oportunidades en las regiones más desarrolladas del país y en gran medida en el exterior, principalmente en los Estados Unidos de América, a esto se suma el azote de los desastres naturales (Mitch) que como evento histórico visibiliza la emigración y a partir de ese momento se entroniza en la población hondureña alcanzado dimensiones de importancia, ya diversifica sus destinos y produce un flujo de remesas que introduce al país en el top mundial de proporciones más altas con respecto al Producto Interno Bruto.