El marxismo del siglo XX dejó de lado lo que quizá podríamos llamar la aportación más importante de Marx: la teoría del fetichismo. Este desarrollo constituye al interior de la obra de Marx el núcleo de su método crítico y al mismo tiempo el descubrimiento de la vida real que subyace como interioridad de la realidad aparente de la modernidad. La reflexión metodológica de Marx pone sobre sus pies no solo la dialéctica hegeliana, sino la realidad moderna como tal.
En este artículo intento hacer ver una dialéctica de Marx que no consiste simplemente en "poner a Hegel de pie", sino que es, incluso, radicalmente distinta de la dialéctica hegeliana. Partiendo del "imperativo categórico" formulado por Marx en 1844, se concluye que este se encuentra también en El capital, y precisamente, en una parte decisiva de esta obra. Se trata de un humanismo de la praxis que es posible recuperar y seguir desarrollando para enfrentar las grandes amenazas de nuestro tiempo.
In the present article, the author shows aspects of Marx's thought, starting from his own writings, to underline his rationality of economic and political action, contrary to the rationality of the market. In it, Marx claims the humanity of human beings as the central criterion for the human being himself. That human beings are the supreme beings for human beings is, according to Marx, a categorical imperative. Marx searches for what the author calls a humanism of praxis, which seems to be the core of his transcendental dialec- tic, and not simply Hegelian dialectic. This is very pertinent today, the author considers, since neoliberalism has brought an extreme form of capitalism interpretation, never before given in history, which implies the extreme abolition of the human. The aim of the author is to contribute to the thoughts about an alternative to the current destructive capitalism. ; En el presente artículo, el autor se ocupa de mostrar aspectos del pensamiento de Marx, partiendo de sus propios escritos, para subrayar su racionalidad de la acción económica y política, contraria a la racionalidad del mercado. Con ella, Marx reivindica la humanidad del ser humano como criterio central para el propio ser humano. Que el ser humano sea el ser supremo para el ser humano es, según Marx, un imperativo categórico. Marx busca lo que el autor llama un humanismo de la praxis, que parece ser el núcleo de su dialéctica trascendental, y no simplemente dialéctica hegeliana. Esto resulta muy pertinente hoy, con- sidera el autor, ya que el neoliberalismo ha traído una forma extrema de interpretación del capitalismo, nunca dada en la historia, que implica la extrema abolición de lo humano. El objetivo del autor es aportar a pensar una alternativa para el destructivo capitalismo actual.
Vivimos en una economía que depende del crecimiento,pero cada vez se hace más obvio que el crecimiento está llegando a sus límites. Parece difícilmente posible mantener un nivel de crecimiento como en las décadas pasadas. Lo que se puede esperar son aumentos del crecimiento a plazos más bien cortos que pronto volverán a colapsar: una especie de decadencia del sistema. Esto tienen que tomarlo en cuenta todos los planes de una reactivación del crecimiento. Hemos derribado todos los límites y llegamos hoy a nuevos límites, cuya existencia la humanidad antes ni sospechaba. El ser humano resulta ser un ser infinito atravesado por la finitud. Vivimos en una economía que depende del crecimiento, pero cada vez se hace más obvio que el crecimiento está llegando a sus límites.Realidad: Revista de Ciencias Sociales y Humanidades No. 132, 2012: 231-250
El artículo discute las bases de los derechos humanos en el mundo de hoy, y presenta la tesis de que ha habido un cambio profundo en la visión de los derechos humanos de parte de los poderes económicos y políticos a partir de la llamada estrategia de globalización, que de hecho es una estrategia del mercado total. También se analizan los rasgos constitutivos del Estado social posterior a la segunda guerra mundial y cómo sus elementos claves hoy son percibidos por los sectores dominantes como políticas de izquierda. Lo anterior unido, especialmente en América Latina, a la sustitución de las democracias controladas por los Estados de seguridad a partir del golpe militar chileno en 1973 y hasta finales del siglo XX. Esto comprueba que un capitalismo neoliberal no se puede sostener a la larga si no es como un sistema de mercado total sostenido por ideologías de Seguridad Nacional y sus correspondientes ejércitos.Los nuevos proyectos de sociedad alternativa que han surgido en América Latina, responden precisamente al totalitarismo de mercado que fomenta el neoliberalismo.
Human rights foundations in today's world are discussed. The author presents the thesis that there has been a profound change on how human rights are viewed by the economic and political powers due to the so-called globalization strategy, which, in fact, is an overall market strategy.The author also analyzes the constituent features of the Social State after World War II and how dominant sectors currently perceive its key elements as left-wing politics. The former is added to the replacement of democracies controlled by Security States, particularly in Latin America, from the Chilean military coup in 1973 to the end of the 20th century. This proves that neo-liberal capitalism cannot be sustained in the long run if it is not treated as a total market system held by ideologies of National Security and their respective armies.The new alternative society projects that have emerged in Latin America exactly respond to the market totalitarianism promoted by neo-liberalism. ; El artículo discute las bases de los derechos humanos en el mundo de hoy, y presenta la tesis de que ha habido un cambio profundo en la visión de los derechos humanos de parte de los poderes económicos y políticos a partir de la llamada estrategia de globalización, que de hecho es una estrategia del mercado total. También se analizan los rasgos constitutivos del Estado social posterior a la segunda guerra mundial y cómo sus elementos claves hoy son percibidos por los sectores dominantes como políticas de izquierda. Lo anterior unido, especialmente en América Latina, a la sustitución de las democracias controladas por los Estados de seguridad a partir del golpe militar chileno en 1973 y hasta finales del siglo XX. Esto comprueba que un capitalismo neoliberal no se puede sostener a la larga si no es como un sistema de mercado total sostenido por ideologías de Seguridad Nacional y sus correspondientes ejércitos.Los nuevos proyectos de sociedad alternativa que han surgido en América Latina, responden precisamente al totalitarismo de mercado que fomenta el neoliberalismo.
El ensayo tiene como propósito lanzar una llamada de atención crítica ante una serie de fenómenos de índole política, económica y social que se gestan actualmente en el orden mundial. Describe, de manera amplia, cómo la globalización alimentada por un nuevo capitalismo evolucionado y la burocracia de las trasnacionales socavan lasensibilidad social del trabajo, el núcleo de identidad cultural de los pueblos y la democracia, transformándolas en fraudulentas y marginales, a la vez que contempla los efectos del surgimiento de la dictadura de la seguridad nacional, la guerra antiterrorista y la ley absoluta, que se legitiman a través del miedo y teorías de conspiración fascistas, como medios para imponer un modelo de desarrollo y una ideología, tras los trágicos acontecimientos del 11 de Setiembre
El ensayo tiene como propósito lanzar una llamada de atención crítica ante una serie de fenómenos de índole política, económica y social que se gestan actualmente en el orden mundial. Describe, de manera amplia, cómo la globalización alimentada por un nuevo capitalismo evolucionado y la burocracia de las trasnacionales socavan lasensibilidad social del trabajo, el núcleo de identidad cultural de los pueblos y la democracia, transformándolas en fraudulentas y marginales, a la vez que contempla los efectos del surgimiento de la dictadura de la seguridad nacional, la guerra antiterrorista y la ley absoluta, que se legitiman a través del miedo y teorías de conspiración fascistas, como medios para imponer un modelo de desarrollo y una ideología, tras los trágicos acontecimientos del 11 de Setiembre
Dem Programm, mit dem Allende die l:!tüdad Popular in den Präsidentschaftswahlen von 1970 in Chile an die Regierung brachte, sah man nicht ohne weiteres an, wieviel Konfliktstoff es in sich barg. Es stellte sich als ein revolutionäres Programm vor, suchte aber seine Verwirklichung innerhalb des Rahmens der in Chile geltenden Gesetzlichkeit. In seiner vorsichtigen Formulierung sprach das Programm auch nicht davon, den Sozialismus aufbauen zu wollen. Es versprach vielmehr, Grundlagen für den Aufbau des Sozialismus zu schaffen. Die Entscheidung darüber, ob auf diesen Grundlagen der Sozialismus aufgebaut werden solle, würde daher frühestens erst bei den nächsten Präsidentschaftswahlen im Jahre 1976 gefallen sein. Die wirtschaftlichen Maßnahmen, die diese Revolution innerhalb der Gesetzlichkeit ankündigte, bauten daher auch zum großen Teil auf bereits unter vorhergehenden Regierungen begonnenen Reformprojekten auf. Soweit diese Maßnahmen hierüber hinausgingen, bewegten sie sich in einer Richtung, in der - zumindest scheinbar - kein besonderer Widerstand der christdemokratischen Partei zu erwarten war, die die größte unter den Oppositionsparteien war.