El reconocimiento de gobiernos es uno de los temas centrales del Derecho internacional. Distintas escuelas y doctrinas tratan de dar respuesta a la problemática que se presenta a los gobiernos cuando se produce un cambio anormal en la forma de gobierno o en los detentadores del poder exterior de otro Estado. El reconocimiento se torna en un objetivo prioritario de los nuevos dirigentes porque les permite consolidar la situación política interna y asegurar la continuidad de las relaciones internacionales. En este ensayo el autor examina un caso histórico: el reconocimiento de la República española por el Gobierno de Chile en 1931. Para ello ha estudiado los Archivos Diplomáticos de Chile, España, Francia y Gran Bretaña. ; The recognition of new Governments is one of the central issues of International Law. Different schools of scienty and doctrines try to give an answer to the trouble that presents States when it takes an anormal change in the Government or in the people who have the external power of another State. Recognition is tooken as a priority objective of new leaders because it permits consolidate the internal political situation and assure foreign relations continuity. The author examines a historical case: the recognition of Spanish Republic by the Chilean Government in 1931. For this essay he has studied and consulted the Diplomatic Archives of Chile, Spain, France and United Kingdom.
El sistema de los delitos del Código penal español orientados a proteger los intereses económicos de los consumidores frente al fraude consta de una primera línea de contención ante las conductas idóneas para lesionar tales intereses, y de una segunda línea que protege del perjuicio patrimonial. Es lógico que este sistema presente fricciones cuando se abordan en detalle las consecuencias jurídicas de la eventual concurrencia de peligro y daño, como se pone de manifiesto a la largo del presente análisis. La solución a los problemas de concurrencia de normas penales viene dificultada por el hecho de que en cada uno de los tres delitos de peligro para el patrimonio de los consumidores tanto la configuración de los tipos como las perspectivas concursales aparecen de distinto modo. Este tratamiento diferenciado no está justificado ni por la fenomenología de las conductas respectivamente descritas ni por el grado de peligro que en la realidad económica representan, puesto que en los tres casos se prohíbe exponer a una pluralidad de consumidores a un peligro patrimonial del que se deriva la elevada probabilidad de lesión masiva. De este estado de la cuestión se deduce la necesidad de racionalización en el sentido de dispensar a los tres delitos un tratamiento legislativo homogéneo.
En esta tesis se analiza el discurso de los editoriales del diario El País, publicados entre 2001 y 2010, sobre las empresas transnacionales españolas con intereses en Latinoamérica. Se identifica el encuadre discursivo, inferido a partir de un análisis lingüístico que permite reconocer el tema, las evaluaciones y las recomendaciones planteadas por el diario. El análisis se fundamenta en las categorías del Afecto propuestas por la Teoría de la Evaluación. A partir del Análisis Crítico del Discurso se ha comprobado que en los editoriales de El País se justifican actitudes y se recomiendan acciones que defienden la libertad total del capital financiero en el contexto económico global. Asimismo, se han constatado las evaluaciones negativas que expresa el diario acerca de los gobiernos de Argentina, Bolivia y Venezuela por la manera en que estos regulan la actividad empresarial extranjera, especialmente la española. ; This thesis analyzes the discourse of the editorials of the newspaper El País, published between 2001 to 2010, about the Spanish transnational corporations with investments on Latin America. It identifies the discursive frame, inferred from a linguistic analysis that enable to recognize the themes, evaluations and recommendations put forward by the newspaper. The analysis is based on the categories of Affect suggested by the Appraisal Theory. The critical discourse analysis prove that the editorials of El País justify attitudes and recommend actions in favor of the total freedom of the financial capital in a global economic context. Furthermore, it is confirmed that the newspaper express negative evaluations toward the Argentinean, Bolivian and Venezuelan governments concerning the way they regulate the activity of foreign corporations, especially the Spanish ones.
Una de las consecuencias menos abordadas por los medios internacionales, y que casi ha pasado desapercibida a la luz de las importantes reconfiguraciones geopolíticas en el mundo árabe, ha sido la revisión de la política árabe y del medio-oriente de Rusia. El desconocimiento que prima en Occidente en relación a esta importante dinámica de la región se explica tanto por el rol ambiguo que han jugado las autoridades del Kremlin, alimentado por la indecisión respecto al rumbo a seguir, así como la omnipresencia de una perspectiva occidental en estos procesos de rápida recomposición de los sistemas políticos en el Magreb y el Mashrek. Sin embargo, el rol real y potencial que podría jugar Rusia en la estabilización y orientación comercial de estos países no deja de ser significativo, dado un pasado de colaboración militar, política y cultural con numerosos regímenes de la región. Asimismo, el abandono progresivo de un rol de superpotencia militar a favor de otro más cercano al de un país emergente cercano de las preocupaciones de los nuevos gigantes del Sur (Brasil, India, China, África del Sur) ha suavizado la imagen del gigante ruso y conducido a una apreciación distinta de su papel en la arena internacional. Mencionemos, de partida, que el mundo árabe, lejos de ser una realidad abstracta para las autoridades del MID ruso, fue, durante largas décadas, un terreno privilegiado de cooperación técnica y científica, que permitió a las autoridades soviéticas expandir su influencia de manera continua. El fin del orden colonial en los 50 y 60, el antagonismo con las antiguas potencias occidentales favorecidos por movimientos de corte marxista nacionalistas (como los de Bourgiba o Nasser) fueron un terreno fértil a partir del cual una importante colaboración técnica, especialmente en el campo industrial y energético, permitió a toda una generación de profesionales formarse en las mejores universidades rusas, a la vez que confirió a muchos cuadros del PCUS un conocimiento de primera mano de la región. La represión e instalación de regímenes autoritarios en muchos de los países de la región, con el concurso beneplácito de los Estados Unidos y Europa, fue progresivamente limitando el campo de acción de las autoridades soviéticas, obligándoles a compartir en los 1980 una hegemonía de corte ideológico, como en el caso de Egipto. El resquebrajamiento y progresivo desmantelamiento de la URSS en 1991 asestó un golpe de gracia a este conjunto de relaciones con el mundo árabe, en parte debido a la incapacidad del Estado ruso por brindar condiciones tan favorables como en la época soviética – se acabaron así los acuerdos particularmente generosos o el trueque, ampliamente utilizados entonces, a favor de intercambios en moneda dura -. Otra de las razones no menos importantes, fue la crisis sistémica del Estado y la economía rusa que durante una década no cesó de retraerse y que perjudicó al comercio exterior, limitando su extensión geográfica y reduciendo las capacidades operativas de los ministerios respectivos en materia de misiones comerciales y personal consular. Intervino en este proceso, sin embargo, una decisión deliberada por parte del gobierno de Boris Yeltsin de no confrontar con los nuevos socios de Rusia –i.e. la Unión Europea y los Estados Unidos- manteniendo así los vínculos comerciales con países "molestos" tales como Irak, Siria y Sudán, dentro de límites aceptables. Esta orientación permitió sin duda a las autoridades rusas contar con el beneplácito de las potencias del mundo occidental y beneficiarse de un tratamiento preferencial; es así como las autoridades del Kremlin lograron hacer entrar a Rusia en el selecto grupo del G8 en 1997 y suavizaron en parte las exigencias occidentales respecto a las reformas de mercado en los programas de ajuste del FMI. Sin embargo, cabe destacar que a pesar de este repliegue comercial, las autoridades rusas nunca cesaron de estar presentes en el mundo árabe, con una red de acuerdos comerciales en los cuales el componente militar era predominante. Esta situación no derivaba de una voluntad beligerante de Rusiastricto sensu, sino de la preponderancia del consorcio militar-industrial en la matriz exportadora rusa. En un escenario de desorganización y recomposición de la industria rusa, el consorcio militar industrial (compuesto entre otros por la MIG Corporation y Rosoboronexport) conoció una relativa estabilidad que le permitió continuar la exportación de productos desarrollados por la ingeniería soviética, como los aviones MIG o la industria de armamento ligera, o incluso, desarrollar asociaciones estratégicas con socios no tradicionales de la historia rusa tales como Israel. Esta última asociación ha conocido en la última década un desarrollo fulgurante que ha sido favorecido por un proceso de emigración masivo de comunidades rusas hacia Israel así como por un desarrollo tecnológico conjunto en materias de armamento y energía. Si la importancia relativa de esta colaboración podría haber aparecido como problemática a los ojos de las lealtades geopolíticas regionales con el mundo árabe, las autoridades del Kremlin se han encargado de sortear este escollo desolidarizando la retórica gubernamental –eminentemente pro-árabe y favorable a las autoridades palestinas del Fatah- de estas vibrantes relaciones comerciales. Esta estrategia ha sido fuertemente condicionada por una contracción del mercado accesible a las exportaciones de armamento ruso, que le ha dejado poca latitud fuera de su terreno de acción natural – como las antiguas repúblicas soviéticas y China- con algunas excepciones latinoamericanas tales como Venezuela y en una menor medida Ecuador. El mercado árabe ha constituido entonces un salvavidas indispensable a la supervivencia de esta industria en Rusia, aunque no ha sido sin riesgos, ya que a pesar que representa un porcentaje importante de las exportaciones de armamento (15 al 30 % según las estimaciones deRosoboronexport (1)), estas se han visto amenazadas en los mercados más competitivos, tales como Arabia Saudita, por poderosos consorcios europeos o norteamericanos.El otro eje de las relaciones económicas rusas en dirección del mundo árabe ha sido el energético, en el que se destacan acuerdos de integración de mercados a partir de los consorcios de Estado más importantes, tales como el gigante energético Gazprom. Rusia ha sido un actor clave en el mundo árabe en el desarrollo de refinerías de costo intermedio así como en la construcción de oleoductos para exportar el recurso hacia mercados occidentales. Las colaboraciones con Argelia, Libia –donde un importante contrato de expansión de la capacidad productiva local quedó en punto muerto-, pero también con Egipto, han conocido una expansión continua, traduciéndose en la construcción de gasoductos que conectaran el gas egipcio con los mercados libaneses y sirios. Finalmente, el área atómica le ha permitido a RosAtom, el consorcio estatal ruso, proveer con transferencias de tecnología de enriquecimiento de uranio a la región, sin obviar a países calificados por Estados Unidos como perteneciente al eje del mal, tales como Irán y Siria. Si las exportaciones de centrales térmicas y atómicas de primera y segunda generación han sido formalmente destinadas a un uso civil, en el caso de la central atómica de Bushehr (2) la colaboración rusa con las autoridades iraníes ha puesto en duda la dimensión estrictamente comercial de este tipo de acuerdos, repercutiendo negativamente en la política exterior rusa con destino de Occidente. La ola de revoluciones en el mundo árabe ha abierto una página de incertidumbre en el desarrollo de estos ejes de la política exterior aquí mencionados. Por una parte, la posible –aunque nada segura- apertura democrática de países como Túnez, Egipto o Siria, conlleva el riesgo de una revisión de las condiciones en las cuales estos regímenes autoritarios atribuyeron concesiones, lo que podría abrir una caja de pandora indispensable para la ciudadanía local, pero que podría igualmente ser altamente embarazosa para las autoridades de Moscú. Más allá de estas revisiones, el Kremlin corre un riesgo real –aunque hasta ahora minimizado en la retórica gubernamental- de perder su ascendente frente a las nuevas potencias liberadoras, tal como fue el caso después de la guerra de Irak. En un plano más estratégico, un cambio de régimen en muchos de estos países podría tensar las relaciones con Israel, y obligar al Kremlin a tomar un partido sin ambigüedades en relación al conflicto arabo-israelí. ¿Pueden las autoridades rusas revertir estas tendencias? Si muchas de las variables no serán despejadas en el corto plazo, algunos ajustes de rango intermedio pueden contribuir a reducir la incertidumbre en relación a lo que viene. Estos ajustes deben entonces orientarse a una restructuración de los equipos de expertos del medio oriente, favoreciendo a Institutos con perspectivas globales y menos marcadas por la herencia soviética tales como el MGIMO que había formado a primeros ministros tales como Evgueni Primakov, expertos en el mundo árabe. De un modo más global, es importante que el Kremlin se decida de una vez por todas a llevar a cabo las transformaciones en el área del comercio exterior, arrastradas por más de una década: esto debería permitir a sus socios distinguir mejor la posición de los consorcios estatales o privados de los intereses geopolíticos de Moscú, muy a menudo opacos. Por último, en un mundo en donde la globalización entre países emergentes es ya una dinámica poderosa, cabe que Moscú se pregunte si es capaz de establecer relaciones comerciales sobre una base de bilateralidad real, lo que conlleva apertura de sectores rusos a las inversiones provenientes de estos países, o bien si destina a estos un trato cordial, pero como lo ha sido en estas últimas décadas, marcado por un fuerte paternalismo.(1) Consultar http://www.bigness.ru/articles/2011-02-22/vpk/122158/(2) Cabe mencionar sin embargo que la colaboración con Irán en relación a esta central empezó ya en el año 1974. *Doctor en Ciencia Política del Instituto de Estudios Políticos de Paris. Master en Política Comparada en Sciences-Po Paris y Master en Estudios Post-soviéticos del Programa IMARS (European University of Saint-Petersbourg/Berkeley). Actualmente es maestro de conferencias de la Universidad Americana-IES Paris y Sciences-Po Paris
El Estado de Chile, en un documento oficial del año 2020, afirma que el Indo-Pacífico es relevante para sus intereses, principalmente para el crecimiento y desarrollo de su economía. Así mismo, distintas publicaciones académicas sostienen lo mismo, que sumado el hecho que los dos principales socios comerciales de Chile son Estados Unidos de América y China, quienes compiten ante la visión Indo-Pacífico, se hace necesario examinar datos que orienten una política ante la visión en comento. En consecuencia, en este artículo se analizan los intereses económicos de Chile ante la visión Indo-Pacífico, usando como perspectiva teórica la interdependencia, arrojando como resultado la dependencia que existe entre Chile y los países de la visión Indo-Pacífico, especialmente con China primero y con Estados Unidos de América después.
Cuando se han superado los tres lustros de los inicios de su implantación en Europa, la radio digital terrestre sigue mostrando un desarrollo lento e incierto, que incluye el fracaso de las tecnologías iniciales, la aparición de nuevas tecnologías que no acaban de suscitar consenso, la inexistencia de una política conjunta de la Unión Europea, el escepticismo de la industria y de las grandes cadenas de la radio analógica, el desinterés de la audiencia y, al mismo tiempo, la expansión de alternativas como la radio por internet o por teléfono móvil. La persistente crisis económica incide además con la pérdida de rentabilidad del sector y la disminución de ayudas públicas. Con ese panorama, ¿sigue teniendo sentido afirmar, como tanto se ha hecho, que "el futuro de la radio es digital"? ; When more than fifteen years have passed since the beginning of its implementation in Europe, the digital radio continues to show a slow and uncertain development, including the failure of the initial technologies, the lack of a broadly accepted standard involving new technologies, the absence of a common policy in the European Union, the skepticism of the industry and large analog radio channels, the disinterest of the audience and, at the same time, the expansion of alternatives such as Internet or mobile phone radio. The persistent economic crisis also affects due to the loss of profitability of the sector and the declining public support. With this picture, does it still make sense to say, as much as has been done, that "the future of radio is digital"?
Han pasado pocos días desde que Telecinco y Cuatro anunciaron su fusión, tras ser permitido este tipo de operaciones por un Real Decreto aprobado en marzo de 2009. La noticia se producía además después de que otras dos televisiones, Antena 3 y La Sexta, dieran a conocer los mismos planes de futuro para ambas cadenas. Todos estos movimientos se incluyen dentro de los cambios que el apagón analógico y la crisis del sector están produciendo en el audiovisual. En nuestro trabajo nos interesa destacar cómo en la última década se han dado las claves y características que han desembocada en la situación actual y que van a modificar la estructura informativa española. Por este motivo, nos interesará estudiar los principales grupos de comunicación que van a ser protagonistas de la llamada "segunda guerra digital", cuando confluyen una serie de intereses económicos y políticos que marcarán la dinámica mediática española hasta nuestros días. ; Few days have passed since Telecinco and Cuatro announced its merger, after this type of operation being allowed by a Royal Decree approved in March 2009. The new also occurred after two televisions, Antena 3 and La Sexta, made known the same plans for its future. All these movements are included in the changes that the switch-off and the crisis in the industry are producing in the audiovisual. In our work we wish to emphasize how some particular features have influenced in the current situation that will change the Spanish information structure. For this reason, we are interested in studying the media groups that will be protagonists of the "second digital war," when economic and political interests come together and make the dynamic Spanish media until today.
RESUMENEn este trabajo se examinan algunos efectos de la alianza política y militar entre España y Estados Unidos durante los años cincuenta y sesenta del siglo XX. Se examina la ayuda técnica, entendida como el conjunto de programas oficiales, contratos e inversiones privadas que sirvieron para transferir a España las técnicas de producción y organización norteamericanas. El análisis cuantitativo y cua litativo revela que tanto dicha ayuda como los círculospro-americanosformados a su alrededor, en parte sustentados en relaciones de negocios anteriores, fueron esenciales en la articulación de los intereses económicos estadounidenses en España. El caso español muestra que la política económica exterior norteamericana de la Guerra Fría favoreció, si bien sólo indirectamente, a la comunidad empresarial de aquel país. En segundo lugar, el trabajo proporciona material e ideas para analizar el «milagro» español como un proceso de crecimiento exógeno.
En este trabajo se examinan algunos efectos de la alianza política y militar entre España y Estados Unidos durante los años cincuenta y sesenta del siglo XX. Se examina la ayuda técnica, entendida como el conjunto de programas oficiales, contratos e inversiones privadas que sirvieron para transferir a España las técnicas de producción y organización norteamericanas. El análisis cuantitativo y cualitativo revela que tanto dicha ayuda como los círculos pro-americanos formados a su alrededor, en parte sustentados en relaciones de negocios anteriores, fueron esenciales en la articulación de los intereses económicos estadounidenses en España. El caso español muestra que la política económica exterior norteamericana de la Guerra Fría favoreció, si bien sólo indirectamente, a la comunidad empresarial de aquel país. En segundo lugar, el trabajo proporciona material e ideas para analizar el «milagro» español como un proceso de crecimiento exógeno. ; This article examines some effects of the political and military alliance between Spain and the United States on the Spanish business community in the 1950s and 1960s. The technical aid is taken to be the set of official programs and private contracts and investments that helped disseminate in Spain the techniques and ideas associated with the American model. The articulation process of the economic interests of the United States in Spain is quantitatively and qualitatively analysed. Our research reveals that technical aid and the pro-American circles formed around it, which were partially based on existing business relations, were essential to such process. The Spanish case shows therefore, first, that US foreign economic policy favoured, even if only indirectly, American business during the Cold War. Second, this work provides material and ideas to analyse the Spanish «miracle» as a rather exogenous growth process. ; La investigación forma parte del proyecto del Plan Nacional de I+D+I SEC2000-1084 ; Publicado